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I’m not Stupid. El grito de nuestros jóvenes.
1.
Hace algunos meses leí una crónica de Augusto Magaña, joven salvadoreño que estudia en Barcelona y escribe para la revista catalana Som Atents. Augusto tiene 20 años y está muy ligado a la realidad de su país, al que vuelve siempre que puede. Su perspectiva, plasmada en la crónica antes mencionada, me desgarró porque significaba escuchar, sin filtros, la voz de los jóvenes, esa vulnerable franja social cercada por el clima de violencia que vive El Salvador. Sin duda, resulta sumamente difícil ser adolescente y joven en nuestro país considerando las pocas opciones con las que cuentan, el futuro oscuro al que se enfrentan, el estigma con el que cargan, las sospechas que los cercan.
En su escrito, Augusto se refiere a un informe del Instituto de Medicina Legal donde se documenta que de enero a junio de 2015 hubo 270 suicidios, y el rango de edad con el mayor número de suicidios (41) se encuentra entre los 15 y los 19 años. “De los 270 suicidios del primer trimestre del año, 120 fueron cometidos por personas de entre 15 y 29 años. 120 jóvenes que deciden quitarse la vida en medio de una guerra que amenaza la vida de todos”, señala Augusto, para luego agregar lo siguiente:
Jóvenes que a lo mejor se sintieron acorralados por la violencia y decidieron que era mejor tomar las riendas del asunto. O quizá jóvenes que quisieron huir, no pudieron y se vieron amenazados, echados de sus casas. Es probable que nunca lo sepamos porque en la mayor parte de los casos se desconoce el motivo del suicidio. En medio de tantos cadáveres, nadie habla de estos muertos. Parece que no existen.
Desde que leí la crónica de Augusto, me quedé con ganas de leer más sobre la realidad que vive El Salvador, pero no desde las voces habituales sino que desde la perspectiva de quienes son el futuro de nuestro país.
2.
Descubrí “Cuarto de adolescente” (2012) de la artista Catalina del Cid gracias a la exposición A cielo abierto que recientemente se mostró en la Sala Nacional de Exposiciones Salarrué, bajo la curaduría de Mayra Barraza. Cuando Mayra me pidió un texto crítico para acompañar el catálogo de la muestra, fui inmediatamente cautivada por “Cuarto de adolescente”. La artista pareciera que le hace un guiño a “El dormitorio de Arlés” de Van Gogh; pero, si es que lo hace, es para ir un paso más allá, para captar una radiografía del difícil periodo de la adolescencia por medio de la representación de su lugar más íntimo. A diferencia de la propuesta de Van Gogh, la habitación que retrata Catalina del Cid no tiene ni una ventana. Por lo tanto, aunque hay afiches decorativos e instrumentos musicales, lo que la obra transmite es cierta sensación de claustrofobia. Los bloques de concreto de las paredes sin repellar informan sobre la clase social a la que pertenece. Los objetos que fomentan su escapismo –videojuegos, televisión, deportes– carecen de color, no transmiten humanidad, parecen objetos que “con su presencia oprimen el espacio, lo llenan, pero de la misma forma que se intenta disimular un vacío”. No pasa desapercibido un detalle: se ha roto con el género, no se sabe si en esa habitación duerme un chico o una chica. Destaca la frase escrita en la pared: “I’m not stupid”. Ese adolescente declara que sabe lo que pasa, subraya que no le están tomando el pelo, anuncia que es consciente. En pocas palabras, por medio de la obra de Catalina del Cid, se nos recuerda que la escasa edad de los jóvenes no implica que no se enteren de lo que sucede a su alrededor, que no se pregunten sobre el lugar que habitan. ¿Hay futuro? ¿Existe algo por lo que soñar y luchar? Entre tantos muertos diarios, es necesario también visibilizar aquellos jóvenes acorralados por el encierro y la incertidumbre, algunos de los cuales, desafortunada y trágicamente, deciden escapar, para siempre, por medio del suicidio.
3.
Hace pocas semanas llegó a mis manos el primer número de la revista Karnaval, editada por un grupo de jóvenes que rondan los 20 años, entre otros participantes de mayor edad. Se trata de una revista que apela a la lucidez, un ejercicio humanista que nos habla directo y claro. Tan claro que, si bien celebro la forma en que este primer número aborda la realidad violenta de El Salvador, por otra parte me quebranta. El análisis descarnado que aparece en los ensayos desenmascara la violencia desde varios ángulos y me hace preguntarme: ¿esto es lo que los adultos hemos heredado a nuestros jóvenes, a nuestro futuro? Leer esta revista ha despertado una fibra importante en mí: debemos empezar a escuchar esta franja social pues mucho podemos aprender de los jóvenes, sobre todo para adquirir conciencia de lo que los adultos –políticos, empresarios, profesores, etc.,– estamos haciendo mal.
El editorial dice así: “el problema social de la violencia tiene imbricado en su seno la supeditación de nuestras vidas al consumo. […] Karnaval es una revista de cuño artístico-intelectual que ahonda en el fenómeno de la violencia con la clara intención de despertar mentes desde hace tiempo embrutecidas por los medios de comunicación masiva y la publicidad y esas cosas que nos acostumbran a adorar […] –embobados, aturdidos, hijos de un tiempo que desconoce su historia y de una sociedad llena de sangre, silencio, dolor y miedo– estamos aquí de pie, nunca rindiéndonos, nunca agachando la cabeza, nunca siendo cobardes. Afilando nuestras lenguas, nos aseguramos de tomar el control de nuestras vidas y de nuestro futuro. No callar: expresarse, decir, despotricar, aullar. ¡Gritar!”
¡Qué fuerza! ¡Qué pasión! Es la voz al unísono de un grupo de jóvenes que quieren adueñarse de su presente y su futuro. Jóvenes que creen en el poder de la palabra, el arte y el pensamiento. Jóvenes que ya no quieren dejarse embrutecer, que quieren empoderarse ante el asfixiante ambiente de violencia, ante las escasas oportunidades. Indudablemente, una nueva vanguardia literaria e intelectual ha nacido en El Salvador. Ha emergido un nuevo relevo para la curiosidad y el ejercicio del pensamiento. I’m not stupid, nos gritan, mientras salen de su encierro.
Mi experiencia con la revista comenzó desde que la tuve en mis manos por primera vez y observé la portada y leí su nombre. Quizá –vaticiné– se relaciona con aquella noción de Alejo Carpentier presente en El reino de este mundo (1949), la que cuenta la realidad por medio de lo carnavalesco, utilizando el sentido del carnaval como motor histórico. ¿Pero por qué con K? Se me vino a la mente aquella película francesa de 1999, de Thomas Vincent, que también se titula así, con K. Pero casi inmediatamente pensé en la novela de Juan Francisco Ferré, la cual se basa en el escándalo protagonizado por Dominique Strauss-Kahn. ¿Será que estos jóvenes quieren utilizar lo esperpéntico para denunciar la corrupción y el poder?, me pregunté. Como buena adulta, arrogante e ingrata, quise imponer mis evocaciones sobre la frescura de su propuesta en lugar de aventurarme en su lectura sin ideas preconcebidas. Shame, shame, shame.
El director-editor de la revista es Rodrigo Barba, pero en ella participan más de una decena de jóvenes escritores y artistas como Andreas Portillo, Crack Rodríguez, Vladimir ChanChán, Eric Doradea, Jocelyn Palomo y muchos más. La revista contiene dibujos de Michelle Zomart y Armando Mendoza, así como ilustraciones de Pedro Perdomo, Krissia Borja y Lazo Larrave. Uno de los escritores, Fernando Recinos, responde por correo electrónico a mi pregunta de por qué han llamado a la revista Karnaval, aclarando lo que la palabra evocaba en mí:
El proyecto quiere invocar la novedad en el terreno de las ideas. La verdad es que es una palabra que tiene mucho tiempo y carga mucho peso simbólico, carga con la idea de las ferias, que en la Edad Media servían de entretenimiento y novedad en los feudos, la idea de la magia, y hasta con la idea de las ferias de gitanos de Cien años de soledad o el carnaval de Río, etc. Y nosotros jugamos con eso, con lo que la palabra puede evocar pero sin casarnos con ninguna. Es por eso que la ‘K’ de Karnaval es una licencia artística que decidimos tomarnos para diferenciarla de la palabra con C. No es un carnaval como los anteriores. O como normalmente se conocen: sucesos que acontecen con cierta periodicidad, sucesos que hay que esperar. Este Karnaval no para. Ha venido para quedarse. Esa es la idea. Todos los artistas que colaboramos con la revista trabajamos en conjunto líneas reflexivas. Todo es gracias a un esfuerzo en conjunto por consolidar un tanque de pensamiento creativo.
El proyecto ha sido financiado por todos los artistas que participan en la revista, aunque también han recibido apoyo de personas que comparten ideas y formas de ver el mundo que la revista impulsa. Karnaval es distribuida por ellos mismos y se puede comprar en la librería de la UCA. El propósito es publicar tres números anuales, cada uno dedicado a un tema específico. El primer número reflexionó sobre la violencia, mientras que el segundo –ya en preparación– tendrá como protagonista a la ciudad, lo urbano.
El primer número está conformado por tres secciones: ‘Ensayos’, ‘Crónicas’ y ‘Literatura y creación’, y cada texto va seguido de citas de autores tan eclécticos como las flores en un campo abierto: Hugo Lindo, Platón, Parra, Borges, Bolaño, Menen Desleal, Coronel Urtecho, Paz, Gelman, Thoreau, Nicole Krauss, Nietzsche, Schopenhauer, Rojas, Michaux, Huerta, Canetti, Cioran, Benjamin, entre otros. Estas citas son pausas en ese intrincado bosque de palabras e invitan a reflexionar aún más profundamente sobre las ideas expuestas por estos jóvenes escritores. La ironía baila a lo largo de los textos, pero también un dolor particular, ese dolor fresco, desnudo y sincero que solo pincha durante la juventud, cuando el escepticismo no es rancio y amargo, sino fuente de curiosidad y exploración. Me llama la atención un recurso utilizado en varias ocasiones, sobre todo en los ensayos: estos jóvenes escritores hablan e interpelan directamente a sus lectores y eso brinda la sensación que estamos ante el derrumbamiento de fronteras, de las líneas que separan a las generaciones.
La revista cierra con tres citas que despiertan a cualquiera lo suficientemente sensible:
"Esto es acerca de padres e hijos. / De cómo los hijos vivimos en tanques, en burbujas que almacenan anhelos / y los sueños y los errores y los arrepentimientos de nuestros padres". Stephan Graham Jones, Flushboy
"Nos esforzamos por ver las cosas en su totalidad, sin prejuicios, / no ya por el placer de la inteligencia crítica, / sino para plantear correctamente la pregunta: / ¿Qué conviene hacer en esta situación?" J.F. Lyotard, Moralidades posmodernas
"Escuchó las cincuenta voces sincronizadas / y en su cuerpo maltratado sintió como si fueran un millón de grillos / que le estuvieran taladrando la masa encefálica". Melitón Barba, Diente por diente
En síntesis, el primer número de Karnaval es un animado aunque desgarrador collage para los amantes del pensamiento crítico, la literatura y el arte. Solo espero leer en los próximos números a más chicas escritoras: quiero pensar que el acto escritural de esta nueva generación incluye también a chicas en la misma proporción.
En Karnaval, jóvenes escritores y artistas se encuentran y emprenden juntos un ágil y vigoroso trayecto: desmenuzan el tiempo que les ha tocado vivir. Se han decidido por la vida, por desgarrar las ideas, y eso ya dice mucho en un país de muerte como es el nuestro.
Puede pasar a darse un chapuzón de poesía y más en la página de Facebook de Karnaval.
Nota aclaratoria: En la primera versión de esta entrada dejé por fuera a Lazo Larrave, también ilustrador de Karnaval. Asimismo, mencioné a Daniuska González, poeta cubana, entre los jóvenes salvadoreños. En el proyecto detrás de la revista participan un grupo de jóvenes pero no son los únicos, también hay algunos adultos. Ya se ha corregido lo anterior y pido las disculpas del caso.
Comentarios
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hey, me parece muy genial que los jóvenes se estén aventurando a hacer cosas, me llama mucho la atención eso de la revista karnaval y la poesía y esas cosas, siempre es bueno que los jóvenes se expresen en un pais de muerte como dices, Tanya, te prometo que iré a comprar la revista.
Publicado por: Tomás Menjívar O. | 07/25/2016 en 12:03 p.m.
la juventud por fin se está expresando y no con balas!!!!
que bueno todo esto, muchas gracias Tania x la labor de divulgacion de estos esfuerzos asi no caen en el olvido... excelente portada la de la revista, la mano ensangrentada le da un toque de esta dura realidad...
Publicado por: Adolfo Bonilla Quijada | 07/25/2016 en 12:10 p.m.
Muy buenas iniciativas las tres. Quisiera leer ese texto del joven Magaña, se lee que es un muchacho comprometido.
Publicado por: Cristian Centeno | 07/25/2016 en 12:13 p.m.
Sí Tanya muy cierto eso que les pides a los jovenes de karnaval se necesita el poder de la mujer para superar las barreras patriarcales.
Publicado por: Abigail Martínez Rivas | 07/25/2016 en 12:23 p.m.
Ustedes, los "adultos" ya fracasaron. Hay que darle la oportunidad a los jóvenes de que se equivoquen...o no.
Publicado por: Oliverio Girondo | 07/25/2016 en 12:29 p.m.
deberíamos unirnos todos y aceptar que somos humanos que tienen cosas que decir independientemente de la edad, Tanya, porque no solo los jovenes conforman esta sociedad, somos todos, los viejos, los ancianos, los adultos mayores.
Publicado por: Luis Alvarado Mendez | 07/25/2016 en 12:31 p.m.
少年たちは常に未来です
Publicado por: Haruki Murakami | 07/25/2016 en 12:32 p.m.
古いの死は生活の生活への道を提供します。ライブ。なぜでしょうか？
Publicado por: Yukio Mishima | 07/25/2016 en 12:33 p.m.
وكان العنف دائما معنا ... في أسلحتنا الباكستانية الجديدة الدمار الشامل
Publicado por: Muhsin Al-Ramli | 07/25/2016 en 12:36 p.m.
La revolución cultural está cerca o se suben o se bajan o se prenden o son tibios o gritan o se comen la lengua o dejan de pedir a dios y salen a las calles o se quedan en su casa haciendo posteos como este para que se pierdan en la inmensidad de la matrix...derritiéndose sobre los ojos sin vida de alguien que espera que el mundo cambie sin hacer nada. Mujeres, no crítiqueis a los jóvenes de la revista por no incluir a "tantas" mejor acérquense con sus textos como ofrendas a la masa de inconformes que se están levantando. Siempre habrá espacio para todos y todas...mientras haya deseo y cómo diría mi compadre O.W: Calidad.
Publicado por: Oliverio Girondo | 07/25/2016 en 12:37 p.m.
No siempre comento estas cosas de esta manera, pero me entusiasma que los salvadoreños por fin estemos despertando. Enhorabuena por todos los esfuerzos que nos traen un poco de esperanza.
Publicado por: Alicia en el país de las Pesadillas | 07/25/2016 en 12:39 p.m.
La vida se desvanece por todas partes y ustedes siguen poniendo peros. ¡VAMOS! ¡CARAJO! ¡SEAMOS SERIOS! levantémonos de esas sillas/ataúd y digamos algo, algo, algo...lo que sea.
Publicado por: Oliverio Girondo | 07/25/2016 en 12:42 p.m.
Ya adquirí la revista y me sorprendió encontrar tanta literatura universal de escritores que pensé habían caído en el olvido, como es el caso del poeta nicaragüense José Coronel Urtecho, o de Hugo Lindo, tremendos poetas, los conocí en su tiempo.
Publicado por: Gregory Corso | 07/25/2016 en 12:42 p.m.
Hablando de otra cosa, me gusta cómo escribís Tanya, seguí así, quién quita y te leemos algún día en la revista.
Publicado por: Oliverio Girondo | 07/25/2016 en 12:45 p.m.
MAYRA BARRAZA ES UNA EXTRAORDINARIA CURANDERA.
Publicado por: Ignacio Echegoyén | 07/25/2016 en 12:45 p.m.
hola, yo vengo aqui a dar mi humilde opinion desde mi experiencia con la violencia en las calles: donde vivo los jovenes se pasan endrogando con pega, alcohol, marihuana, cafe, cocaína, heroina, de todo, bien surtido, y no alcanzan a decir algo de su situación muy particular que ellos que viven que nos haga caer en el cinco de que nuestros jovenes se estan muriendo y cada vez crecen hacia la vida adulta como un árbol torcido que en la tormenta se agita.
Publicado por: Samuel Torres | 07/25/2016 en 12:52 p.m.
DICHOS DE AGUR
tres cosas hay que me han impresionado
y una cuarta que sigo sin descifrar:
el choque sin persona de un muerto echado al agua.
un vítor de volátil o silbado de policía en la selva.
el ¡clic! de un revólver al montarse.
y la palabra APORÍA, empleada
por el Dr. Pedro Laín Entralgo en uno de sus ensayos.
Carlos Martínez Rivas
Publicado por: Carlos Martínez Rivas | 07/25/2016 en 01:00 p.m.
tANYA, TU MENSAJE ES ESPERANZADOR PERO QUIERO VER MÁS, QUÉ MÁS HAY, ¿HAY OTROS JÓVENES?
Publicado por: Carlos Martínez Rivas | 07/25/2016 en 01:06 p.m.
¿HAY OTROS JÓVENES QUE POR AHÍ PULULAN COMO PÁJAROS?
QUE VUELAN
QUE SE ESCONDEN EN QUÉ NIDOS
DÓNDE ESTÁN SUS NIDOS
¿SUS NIDOS DE AMOR?
¿DE DOLOR O DE MUERTE O DE TORTURAS?
NADA SE CONSTRUYE COMO LOS DEDOS QUE TECLEAN COSAS SIN SENTIDO.
Publicado por: Carlos Martínez Rivas | 07/25/2016 en 01:07 p.m.
Muy buen texto, hija, me hizo pensar en aquellos tiempos en los que la juventud estaba más exaltada y se envalentonaba.
Publicado por: Maribel Alegría | 07/25/2016 en 01:08 p.m.
NADIE ES ESTÚPIDO.
Publicado por: Josué Galdámez | 07/25/2016 en 01:14 p.m.
Deberíamos preocuparnos todos por los tiempos que corren, los jovenes se están expresando, pero expresarse no basta, que hagan algo, por Dios, le ruego a Dios que los jóvenes hagan algo ya.
Publicado por: Alberta Quijada | 07/25/2016 en 01:15 p.m.
"La habilidad del hombre es así resultado de la naturaleza y de la historia y muestra, por lo pronto, la perfecta continuidad entre lo biológico y lo psíquico, entre la naturaleza y la historia."
Ignacio Ellacuría.
Pensemos más allá de las fronteras conceptuales, por favor. Leamos a Ignacio Ellacuría. Los jóvenes, los viejos, las mujeres embarazadas, todos.
Publicado por: Thomas Anderson Laínez | 07/25/2016 en 01:17 p.m.
quisiera conseguir esa revista ya.
Publicado por: Jeremías Lucaks | 07/25/2016 en 01:18 p.m.
Soy poeta, ¿a qué dirección web remito mis textos para que sean publicados?
Publicado por: Alejandro Salvatierra | 07/25/2016 en 01:22 p.m.
Ese cuarto me recuerda a mi niñez plagada de toda la cultura pop. La cultura pop nos enferma, y lo veo en mi hijo, que está atrapado en la casa jugando videojuegos todo el día y masturbándose.
Publicado por: Estiven Vargas | 07/25/2016 en 01:23 p.m.
Gracias Tania por toda esta información, la compartiré en mis clases, doy clases en un instituto nacional. A los muchachos de noveno les entusiasmará saber que hay otros jóvenes un poquitín mayores que ya se están animando.
Publicado por: Jacinta Raquena | 07/25/2016 en 01:31 p.m.
Aclaración, Tanya: la revista cuenta con otro ilustrador más: Lazo Larrave.
Publicado por: Luis XVI | 07/25/2016 en 01:32 p.m.
Segunda aclaración: la revista no es meramente de jóvenes, el rango de edad de los artistas que trabajan en el proyecto va desde los 17 años de edad hasta los 58.
Publicado por: Luis XVI | 07/25/2016 en 01:37 p.m.
Ya leí la revista: recomendadísima.
Publicado por: Brandon Ulises | 07/25/2016 en 01:38 p.m.
El Salvador es un país espantoso, a veces me da mucho miedo transitar en las calles. Más en la noche. Algunos dicen que no pasa nada, pero sí pasan cosas, he visto muertos en la carretera y he escuchado historias de ajusticiamientos policiales. Cuidado todos, si se asesinan ciudadanos salvadoreños con la pancarta de terroristas, luego vos también podrías ser asesinado por terrorista. ¡Cuidado con los terroristas literarios!, dirán.
Publicado por: Julio Almendariz | 07/25/2016 en 01:41 p.m.
La APORÍA fundamental de esta sociedad está cimentada en la ignorancia, la gente no lee y cuando lee solo lee tonterías en redes, como esta.
Publicado por: Dr. Pedro Laín Entralgo | 07/25/2016 en 01:48 p.m.
Ojala todos esos que están ocultos y que tienen cosas que decir emerjan con iniciativas como esta, los jovenes y los adultos y los ancianos deben pronunciarse acerca del estado de cosas.
Publicado por: William Gutiérrez | 07/25/2016 en 01:56 p.m.
Después de haber analizado todo esto, concluyo que como ciudadanos debemos preocuparnos por hacer llegar estas iniciativas lo más lejos posible, hay que apoyar este tipo de esfuerzos, no dejarlos en el olvido.
Publicado por: Amanda Pelaez | 07/25/2016 en 02:04 p.m.
En las actuales corrientes culturales, cualquier esfuerzo, sea de jóvenes o viejos, es neutralizado en la futilidad de las redes, cuidado muchachos, recuerden las enseñanzas de...
Publicado por: Lito Menjívar | 07/25/2016 en 02:05 p.m.
En los últimos años que me quedan de vida, esto representa para mi algo que desde hace mucho tiempo no veia.
Publicado por: Cristina López | 07/25/2016 en 02:06 p.m.
¿cuántos otros muchachos han de morir por culpa del suicido?
Publicado por: Aristipo Batres | 07/25/2016 en 02:07 p.m.
Hay que tener confianza en aquellos que se atreven a hacer cosas, interrogarlos, cuestionarlos, pero no molestarlos o interrumpirlos en sus esfuerzos. Hay que tener confianza.
Publicado por: Abelardo Castro | 07/25/2016 en 02:08 p.m.
No hay que esperar a mañana para hacer cosas hoy. Enhorabuena, jóvenes, muchachos de esta tierra calurosa que nos heredaron los mayas.
Publicado por: Carlos Laso Martínez | 07/25/2016 en 02:09 p.m.
tenia miedo antes de esto...
Publicado por: José L. Gómez | 07/25/2016 en 02:11 p.m.
Melitón Barba es un tremendo escritor, yo me leí hace ya años un libro que se llama Hermosa Cosa Maravillosa de él. Es simplemente extraordinario. Lo onírico fusionado con la realidad de nuestros países sometidos. ¡Bravo!
Publicado por: Toño Morales | 07/25/2016 en 02:12 p.m.
Q genial lo q hacen los jovenez
los admiro mucho
ya no hay gente con valor en este paiz
tant muerte q hay pero ellos tiene fuerza y balor para gritar
ADELANTE
Publicado por: Ivan Santos Gomez | 07/25/2016 en 11:08 p.m.
Ciertamente no comprendí en su totalidad lo que se escribió, unas partes son excelentes y me dejaron una impresión muy fuerte en los sentidos , pero en estos tiempos cuando esto se ponga de moda, va a ser un millón de veces mejor que la basura que escuchan los niños hoy día.
Publicado por: Simón Revelo | 07/25/2016 en 11:34 p.m.
Me gusta mucho el proyecto amigos, siempre quise compartir mis textos bajo portadas como esta. Gran Ilustración!
Publicado por: Flor Matías | 07/25/2016 en 11:37 p.m.
Nunca antes había leído una crónica como esta, muy buena. Deberían los jóvenes animarse a decirle a la gente que es importante leer. Hay que saber leer para poder mejorar la cultura salvadoreña. Pero parece que nadie quiere mejorar la cultura salvadoreña. O a nadie le importa. No sé.
Publicado por: Elías Segundero | 07/25/2016 en 11:51 p.m.
aquí les comparto un rap acerca de todo esto que somos:
no quiero
perder el tiempo
en este momento
solo lo lento
emerge de mi cuerpo purulento
no
es broma
pero si eso te emociona
decime cómo se relaciona
el Estado y la gloria individual
de una sociedad
que nunca ha pensado
en lo igual
la igualdad de todos entre todos
la igualdad de todos contratodos
la igual de un tiempo
histórico-siniestro
se los cuento
de un momento a otro
mientras tanto miro
en la tele unos potros
en mi mente unas fotos
en mi suerte unos cocos atemporales
que me advierten que no me resbale con la tinta pegajosa
sudorosa
mantecosa
y vidriosa de la muerte.
Publicado por: Rafael Agustín | 07/26/2016 en 12:05 a.m.
EXCELENTE! DE VERDAD EXCELENTE! Me encanta ver que a pesar de tanta podredumbre y estupidez aún hay jóvenes apasionados por hacer algo. Y digo "algo" por no decir "arte" u "cambio" y es que hemos caído en un letargo mental y espiritual en el que hacer más que dormir, respirar, comer y (perdonen la palabra) cagar es una proeza. De verdad yo a mis 45 años no había visto un proeza de esa índole desde hace muchos años, ustedes ya sabrán de qué años hablo. Ojalá la revista salga de El Salvador, me gustaría mucho leerla. Adelante muchachos! sigan así y nunca bajen la cabeza. Saludos desde Maryland.
Publicado por: Sergio Romero | 07/26/2016 en 12:08 a.m.
Yo, la verdad siempre escribí, desde pequeño quise ver cómo funcionaban las teclas de la computadora de mi papá. Bueno... en realidad quería escribir un rap también. Gracias por el espacio en blanco, el lienzo, (jaja).
Cambia tu vida
esta realidad es adiposa
apaga tu teléfono y enfocaté en otracosa
menos furiosa
que contenga tu famosa prosa
donde hablas de un mood acelerado
conformado con un carro
con tamaño agrandado
y embadurnado con oro.
Saca pasta
Sáca Pasta
Sáca pisto de un cajero
Sácate las tripas
échalas a la ciudad adiposa
sabrosa
cumbia con tambor
virtud y regaetón.
Publicado por: Samanta Cortez | 07/26/2016 en 12:35 a.m.
Vaya yo entiendo que el arte y todas estas cosas de la escritura sean algo bueno porque puesi hay que expresarse lo que no entiendo es porque le dan la gran importancia si escribiendo revistas no se come papa. Estos jovencitos deberian estar haciendo cosas de verdad trabajando o haciendo algo de provecho de para su famila. Con esas boladas no se va a resolver ninguno de nuestros problemas. A mi mi papa desde pequeño me dijo que si las cosas no te gustan hay que cambiarlas pero yo no veo que esto cambie algo. Estos monos tienen el tiempo para perder escribiendo el que no tiene comida no escribe papa... asi de simple.
Publicado por: Ismael Ramirez | 07/26/2016 en 01:05 a.m.
estoy de acuerdo Ismael Ramírez El arte podr ser valioso pero eso no vende y si no hay pisto no hay hartazon.
Publicado por: anastacio sura | 07/26/2016 en 01:09 a.m.
JAJAJAJA! Hey! Yeah! buena onda brothers. Me llega lo que están haciendo. ¿Puedo escribir un rap también? Lo voy a escribir igual, a ver qué les parece. Buena onda.
Salgo de la casa voy a tablear
de arriba para abajo
no dejo de remar
izquierda derecha
no voy a parar
En las paredes hay manchas
de inconformidad
de una sociedad
que no sabe pa' donde mirar
Y yo sé
y yo sé
Y yo sé
que las noticias
no dicen la verdad
en mi terruño
no solo corre la sangre
hay hermandad
de un pueblo herido
que quiere sanar
y amar
y volar
de hermanos que no quieren llorar
Y yo me pregunto
¿Por qué no juntos caminar?
Desde mi tabla todo lo veo con claridad.
Pues espero que les haya gustado todavía voy empezando en esto, pero ahuevo buena onda brothers! voy a ver si consigo la magazine. Yeah!
Publicado por: Toto Rosales | 07/26/2016 en 01:16 a.m.
que bueno que la gente se anime a expresarse por medio de rap, yo no soy rapero, pro si tengo un par de canciones que he escrito, me voy a animar con el rap, aquí les va
nunca fuimos una lata
destruida por la corrupción
nunca fuimos un camino
que terminara en perdición
somos esto
somos esto
somo esto que se parece a un cesto
somos esto
somos esto
no me vengan a hablar de incesto.
Publicado por: Jefferson Rivadavia | 07/26/2016 en 12:34 p.m.
Una obra magistral,algo nuevo, ya hacía falta algo como esto en el país, no se veían desde el 44,nuevos poetas golpeando la tierra
Publicado por: Michel Houllebecq | 07/26/2016 en 12:52 p.m.
Ya conseguí la revista recomendada, es increíble la cantidad de arte derramada en esta.
Publicado por: Auguste Comte | 07/26/2016 en 12:54 p.m.
Bola de vagos sin oficio
Publicado por: Fran ayala | 07/26/2016 en 12:58 p.m.
Buena revista la adquirí en la UCA se las recomiendo a todos aquellos que quieren leer algo que no sean los periódicos populares
Publicado por: Rodrigo Rivas | 07/26/2016 en 01:20 p.m.
Son interesantes todos estos esfuerzos juveniles. Ojalá toda la juventud tuviera las ganas y los ánimos. Ojalá mi vida no fuera como una mecedora que va y viene pero siempre estática, siempre estática como la oscuridad que deja un foco que explota en medio de la noche.
Publicado por: Alessandra Orantes | 07/26/2016 en 03:16 p.m.
La verdad es que soy tímido al hablar con la gente porque mi cuerpo es horrible y la gente me mira y a mi me encula la pizza,el queso, la masa, ed taaaaaan rico. Ey, pero awebo volviendo a lo de la magazine como dijo el broder allá arriba: yo sí he leído la revista y está vergona a vee si les llega mi lírica cuando se las envíe por correo electrónico.
Publicado por: Josue echevería | 08/04/2016 en 03:58 p.m.